Como informa CENIA (Centro Nacional de Inteligencia Artificial), la plataforma IA GILDA revoluciona la eficiencia energética en hogares chilenos. La inteligencia artificial optimiza el consumo y reduce la huella de carbono
La inteligencia artificial entra con gran protagonismo en el mercado chileno. Su contribución a la minería a cielo abierto, por ejemplo, es uno de los grandes avances en los que ha aportado esta tecnología que tantos cambios ha generado a nivel mundo.
Esta vez, un equipo de destacados investigadores del Centro ANID CENIA ha presentado un esperanzador proyecto que promete cambiar la forma en que los hogares chilenos consumen energía. La plataforma inteligente, conocida como GILDA, tiene como objetivo gestionar de manera eficiente la demanda de energía, allanando el camino hacia una matriz energética más sostenible y reduciendo la huella de carbono sin aumentar los costos para los usuarios.
A medida que la demanda eléctrica global sigue creciendo, impulsada por la electrificación de diversas industrias como el transporte y la calefacción, se hace cada vez más crucial encontrar formas eficientes y sostenibles para manejarla. Los líderes detrás de esta innovadora iniciativa son los expertos Gonzalo Bustos y Marcelo Matus. Su enfoque se centra en desarrollar un asistente que trabaje en armonía con los dispositivos energéticos de los hogares, permitiendo una gestión más inteligente de la energía eléctrica.
El proyecto GILDA busca superar las limitaciones actuales de las soluciones disponibles en el mercado, que ofrecen principalmente monitoreo y control remoto básico de los dispositivos, sin una verdadera capacidad para gestionar el consumo eléctrico de acuerdo con variaciones en las tarifas, emisiones o condiciones de la red eléctrica. Aquí es donde entra en juego la inteligencia artificial.
GILDA y el uso de la IA para la optimización y gestión de la energía
La plataforma GILDA aprovecha algoritmos de inteligencia artificial, incluyendo técnicas de optimización y aprendizaje profundo (deep learning), para permitir la gestión personalizada de sistemas individuales y la asociación de múltiples usuarios. Gracias a esto, se optimizará el funcionamiento de las redes eléctricas, reduciendo la necesidad de costosas inversiones en infraestructura.
El corazón de esta plataforma es un potente motor de cálculo y análisis, respaldado por modelos basados en IA, que monitorea los artefactos energéticos de los hogares, oficinas y comercios. La plataforma ofrece funcionalidades de supervisión, aprendizaje y diagnóstico, lo que permite a los usuarios conocer sus requerimientos energéticos diarios y por hora.
Uno de los aspectos más emocionantes de GILDA es su capacidad para recibir señales externas, como fluctuaciones de precios, emisiones de carbono y disponibilidad de energías renovables. Con esta información, la plataforma puede determinar el mejor momento para encender y apagar los dispositivos, garantizando el uso de electricidad en los momento del día que resulten más económicos, acción que aporta a la sostenibilidad del planeta. Además, se puede aprovechar al máximo la producción de energía renovable para reducir aun más la huella de carbono.
El impacto potencial de GILDA va más allá del ahorro de costos y la reducción de emisiones. La plataforma también puede ayudar a gestionar la carga eléctrica de automóviles eléctricos, asegurando que se carguen en momentos óptimos y evitando sobrecargar la red eléctrica. Esta función se vuelve especialmente relevante a medida que aumenta la electrificación del transporte y la necesidad de una infraestructura eléctrica más flexible.
Los investigadores están entusiasmados con las posibilidades que ofrece GILDA para transformar la forma en que las casas de los chilenos consumen energía. Al adoptar la inteligencia artificial y la gestión energética inteligente, estos hogares podrán reducir sus emisiones de carbono, optimizar su consumo eléctrico y contribuir significativamente a la transición hacia una matriz energética más limpia y sostenible.
A medida que la inteligencia artificial continúa impulsando avances en la eficiencia energética y la sostenibilidad, el país se posiciona como un líder en la adopción de tecnologías limpias que beneficiarán tanto a la sociedad como al medio ambiente. Con proyectos innovadores, como GILDA a la vanguardia, Chile demuestra su compromiso con un futuro más verde y una gestión de energía inteligente.
