El Instituto Curie de Francia ha puesto en marcha una IA que es capaz de detectar cánceres indetectables por otros métodos más tradicionales
Esta nueva tecnología tiene muchas aplicaciones, y aunque no goza de tan buena fama hoy en día e incluso grandes pensadores contemporáneos le temen, sí es susceptible de utilizarse para ayudar a la salud de las personas. Es el caso, por ejemplo, de la aplicación que idearon un conjunto de investigadores que integraron la IA en su trabajo para conseguir uno de los objetivos más relevantes de la salud pública en Gran Bretaña y en el mundo entero: dejar de fumar.
Según informa la TV francesa BFMTV., la inteligencia artificial también podrá ayudar a detectar cáncer en pacientes afectados sin usar los métodos que se tenían en cuenta hasta el momento y que formaban parte de la medicina moderna. Así es como el Instituto Curie ha puesto en marcha un software basado en esta tecnología para identificar cánceres indetectables de aquella manera.
El Instituto Curie es un centro de investigación médica y una fundación privada sin ánimo de lucro con sede en París que se dedica a investigar el cáncer, y que lleva el nombre de la célebre premio nobel Marie Curie. Fue la primera y hasta el momento la única persona que ha recibido dos de estos galardones en disciplinas distintas, como la física y la química, además de llevar a cabo grandes avances en el campo de la radioactividad, antecedentes científicos para la radioterapia.
Un paciente diagnosticado por una IA
Es esta entidad la que anunció que la IA es capaz de seguir la pista a algunos cánceres, tras desarrollar algunos tests a un paciente en la cincuentena llamado Wilfrid.
El hombre fue diagnosticado con dos tumores al cerebro en 2019 tras sufrir crisis de epilepsia y, aunque fue operado con buenos resultados, los tumores no remitieron y volvieron a aparecer, nuevamente en el cerebro, pero también en la espalda. En el análisis del tumor cerebral se dio un veredicto que el equipo médico y el involucrado no se esperaban: había más de un 85% de probabilidades de que el cáncer, en realidad, proviniera del riñón, el origen inicial.
Este diagnóstico no se consiguió a través de los análisis previos, ya que los médicos no pudieron determinar con exactitud las causas. “La inteligencia artificial ha determinado en diciembre del año pasado que el cáncer de riñón era el cáncer de origen”, afirmó el paciente al medio.
El procedimiento consiste en que la inteligencia artificial hace suposiciones de este tipo a partir de una base de datos específica, la que finalmente arroja resultados.
Así, la IA funciona como una herramienta que trabaja en conjunto con los profesionales de la salud en un presente donde la salud podría cambiar. Sarah Watson, médica investigadora del Instituto Curie, cree que la profesión médica debe incorporar esta herramienta lo antes posible a la medicina. “Se puede aprender a usar estas herramientas como se ha aprendido a usar máquinas de rayos X”, afirma a la TV francesa.
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