Un estudio de la OEI y ProFuturo aborda el desafío de la educación en América Latina tras el auge de la IA

La llegada del Covid-19 extendió más la brecha digital entre clases, lo que ha llevado a replantearse cómo incide la IA en la educación en Latinoamérica en tanto “campo de posibilidades y riesgos inciertos”

Tras la necesidad de la educación a distancia debido a la pandemia de la Covid-19, el acceso a la a Internet en particular y la tecnología en el ámbito general fue una de las grandes discusiones en los países de América Latina, zona en la que la interrupción de las clases presenciales fue más larga. Si había una brecha digital antes de la emergencia sanitaria, la situación la agravó más poniendo varios factores en el panorama que han profundizado las desigualdades.

Teniendo en cuenta el estado actual de la tecnología y el auge de la IA, la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) y ProFuturo, el programa de educación digital de las fundaciones Telefónica y La Caixa de España, emitieron un informe denominado El futuro de la Inteligencia Artificial en América Latina, el que busca la colaboración pública-privada en el planteo de objetivos reales de esta época. El mismo plantea varios retos para combatir esta situación centrándose en combatir las desigualdades de la región.

“La inteligencia artificial, antes solo pensada e imaginada por el mundo del cine o de la ciencia ficción, está entre nosotros y ya es una realidad”, afirma el documento, que menciona que es precisamente en el ámbito educativo donde puede producir ventajas, además de “riesgos y límites” que requieren estudio.

Según el documento, hasta ahora en el campo de la educación las grandes modalidades de intervención digital en el área son el big data, machine leraning y learning analytics, lo que incluye además la capacidad de análisis de datos y el reconocimiento facial aplicado para reconocer las expresiones de los alumnos. “Estos desarrollos están llenos de promesas. La IA puede ayudar a personalizar el aprendizaje, facilitando al creación de trayectorias individuales con retroalimentación inmediata” y asegurando seguir el ritmo a cada estudiante.

Se planteó una encuesta que tiene como punto de partida la pregunta “¿de qué manera se está desarrollando actualmente la IA y cómo se prevé que evolucionará de aquí al año 2030 en América Latina?”. Esta se fundamenta en la relevancia de la inteligencia artificial de la IA en la educación, el rol de las instituciones, los escenarios educativos futuros, recomendaciones para su desarrollo y ejemplos de iniciativas. Respondida por 67 personas pertenecientes al ecosistema privado de la tecnología y la educación, funcionarios públicos y grupos de académicos, 17 países de la región están representados en la muestra.

Los encuestados coinciden en que la IA tiene por el momento y “tendrá un mayor impacto en la educación superior que en la educación básica”, a la vez que en el futuro crecerá en las áreas de aprendizaje que superan el contexto escolar y en los ámbitos de estudiantes con necesidades especiales. El impacto de la inteligencia artificial en la educación será pronunciado en estos próximos siete años, según la mitad de los expertos consultados, aunque el sector privado, el gubernamental y los académicos están de acuerdo en que se generarán cambios graduales y no de golpe, entre moderados y profundos.

Por otro lado, son las grandes empresas a nivel internacional las llamadas a tener un papel crucial en la inclusión de la IA en el sistema educativos, seguida por el Estado, una tendencia en la zona. En el ámbito de las condiciones y competencias en el desarrollo de esta tecnología, la recomendación general es potenciar el acceso a Internet, la formación de los docentes y el pensamiento crítico de los estudiantes.

El informe además destaca iniciativas públicas y privadas ya aplicadas en distintos países latinoamericanos, que sirven como ejemplo para otros estados.

El documento completo puede descargarse aquí.