La inteligencia artificial está en boca de todos y resulta imprescindible tener claros algunos conceptos para no perdernos de nada
El conjunto de algoritmos y formas de imitación de la inteligencia humana, más conocida como inteligencia artificial, no es nueva. Según la Unesco, nació de forma oficial un poco después del fin de la Segunda Guerra Mundial, en 1956, en el Dartmouth College en Hanover, EE.UU.
La primera conferencia sobre el tema, que en principio trataría sobre máquinas inteligencias y donde se nombró por primera vez la IA fue organizada en esa ciudad de New Hampshire por los investigadores Marvin Minsky, John McCarthy, Nathaniel Rochester y Claude Shannon, quienes juntos bautizaron esta nueva disciplina.
Más atrás en el tiempo precisamente en la mencionada guerra, nos encontramos con el antecedente de Alan Turing. Además de decodificar para los aliados los códigos de Enigma, la máquina de cifrados de los alemanes, desarrolló los fundamentos de la computación de nuestros días con la máquina que lleva su nombre y fue uno de los primeros en reflexionar sobre la posibilidad de que los computadores pueden pensar por sí mismos.
La IA tiene una base importante detrás y hoy en día, con su masificación, se usan todo tipo de palabras para hablar de ella. Por eso, iremos dando por entregas este glosario, para que nadie quede al margen de la cuarta revolución industrial.
A – Aprendizaje automático (Machine Learning): La base de la inteligencia artificial. El aprendizaje automático permite a las máquinas aprender y mejorar a través de la experiencia sin ser programadas explícitamente. Es como enseñarle a una máquina a pensar por sí misma.
B – Big Data: Un ingrediente esencial en el campo de la IA. Se refiere al análisis y procesamiento de grandes volúmenes de datos para obtener información valiosa. Los algoritmos de IA se alimentan de Big Data para identificar patrones y tomar decisiones.
C – Chatbots: Los fieles asistentes virtuales que se han vuelto cada vez más populares. Chat GPT es el más conocido de ellos. Estos robots de conversación utilizan la inteligencia artificial para interactuar con los usuarios y brindar respuestas rápidas y precisas. ¡Pregúntales cualquier cosa!
D – Deep learning: Una rama avanzada del aprendizaje automático que se inspira en la estructura y el funcionamiento del cerebro humano. Los sistemas de deep learning utilizan redes neuronales artificiales, como las humanas, para procesar información compleja y realizar tareas como reconocimiento de voz o imagen.
E – Ética en la IA: Un tema candente y necesario, que ha llevado a grandes expertos a proponer una moratoria de seis meses para el desarrollo de la inteligencia artificial que no muchos están cumpliendo. La ética en la IA se refiere a los principios y normas que guían el desarrollo y uso de la inteligencia artificial de manera responsable y justa. La transparencia, la privacidad y la equidad son algunos de los valores clave en esta área.
F – Fábrica inteligente: Un ejemplo impresionante de cómo la IA está transformando la industria y la logística. Las fábricas inteligentes utilizan tecnologías avanzadas como robótica, sensores y análisis de datos para mejorar la eficiencia, la calidad y la seguridad en los procesos de producción. Algunas usan perros-robot, como el famoso Spot, para automatizar procesos y darle órdenes imitando el lenguaje humano. ¡Un vistazo al futuro!
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